Si el siglo XIX estuvo marcado por la ‘europeización’ del mundo, seguida de su ‘americanización’ en el siglo XX, la ‘asiatización’ global está ya en marcha en el siglo XXI. Actualmente, Asia representa más de la mitad de la población mundial y la mitad de la economía global, y supone una creciente fuente de capital e inversiones globales para todas las demás regiones del mundo.